Constantemente las madres acuden a consulta argumentando “Mi niño no come nada”, afortunadamente la mayoría de la veces uno voltea a ver al niño y si es un bebé de brazos se podrá ver una cara regordeta y sonrosada, o si es un niño que ya camina se podrá observar un niño que parece bala, que va de arriba a abajo del consultorio.
Entonces viene la pregunta ¿Cómo es posible que si no come “nada” luzca tan regordete o tenga tanta energía?, uno vuelve a preguntar ¿Segura que no come “Nada”? y la madre repite con toda seguridad “NADA doctor”
¿Realmente el bebé no come nada?
Primero tendríamos que definir ¿qué es para la madre (o la abuela en algunos casos) no comer “nada”? porque he visto niños con sobrepeso donde se afirma que no come nada, entonces algo aqui no cuadra.
Después de escuchar tantas veces la frase “mi niño no come nada” en la consulta, en muchas ocasiones podríamos sustituir esta frase por las siguientes:
- “no come lo que yo quiero que coma”
- “no come la cantidad que yo quiero que coma”
- “no come la cantidad que comía antes”,
- “no come lo que no le gusta”
- “no come nada, solo come “X” alimento”
- “no come nada, solo toma leche”, etc., etc.
Pero creanme, los bebés si comen.
¿Por qué un bebé que antes comía bien ahora ya no lo hace?
Cabe señalar que las necesidades calóricas y alimenticias van cambiando en las diferentes edades pediátricas, así los bebés en los primeros meses de vida donde pueden subir hasta un kilo de peso cada mes, pueden llegar a consumir más calorías que un bebé de 12 meses donde su crecimiento y ganancia de peso se estaciona un poco de manera natural, lo mismo sucede alrededor de los 3 a 5 años.
Por lo tanto un niño a los 12 meses y/o a los 3 años que disminuye naturalmente su curva de crecimiento, va disminuir su necesidad calórica y por consecuencia su ingesta de alimentos, así puede que con apenas una pequeña porción de alimento tenga la energía suficiente para andar activo todo el día y mantener su curva de crecimiento en la normalidad.
Estas edades donde disminuye el apetito no tienen que ser exactas, puede que se inicie desde los 9, 10 u 11 meses, o a los 2 años en lugar de los 3 años, o que pase a los 4 o a los 6 años en lugar de los 5 años.
Un bebé que no sabe ni le importa cuanto pesa o cuanto mide, tiene pocas preocupaciones o ninguna que le quiten el hambre, conoce pocos sabores, si come poco o simplemente no quiere comer un alimento determinado lo más seguro es porque su organismo no lo necesita o porque probablemente ya ha consumido las calorías que necesita para estar bien.
¿Y por qué come poco un bebé?
Hay muchas situaciones que puede llevar a un niño a tener una ingesta disminuida de alimentos, pero hasta el momento no he conocido a ningún niño ni a ninguna persona que no coma “nada” ya que eso es incompatible con la vida.
Lo más frecuente es que estos niños estén alrededor de la edad de los 12 meses, o entre los 3 a los 5 años y por lo tanto sea una causa natural por la que su apetito disminuye coincidentemente con la disminución en la velocidad con que crecen y ganan peso, esto lógicamente se resuelve al sobrepasar estas edades donde la curva de crecimiento se vuelve a disparar y por lo tanto las necesidades calóricas vuelven a aumentar.
Los bebés y niños buscan instintivamente una fuente de energía, alimentos que les proporciones calorías para llevar a cabo las funciones básicas de su organismo y secundariamente tener un desarrollo y crecimiento adecuado, va a depender de nosotros que alimentos pongamos a su disposición.
Es frecuente escuchar en consulta “doctor es que el niño solo quiere comer huevo (por ejemplo), no come otra cosa”, y uno le dice a la madre que su niño solo come huevo porque ella solo le da huevo, la madre inmediatamente responde “no doctor, también le ofrezco verduras y nada, frutas y otros alimentos y no los quiere, entonces tengo que hacerle su huevo para que coma, porque como va a andar con su estomaguito vacío”
Es obligación del adulto poner alimentos saludables al alcance de los niños y limitar el acceso a los no saludables
El niño solo busca alimentos que le den energía, y si además le gustan que mejor, ellos no saben si un alimento es saludable o nutritivo, eso lo debe saber mejor el adulto que pone el alimento al alcance del niño, si a un niño le dan a elegir entre una galleta (o chocolate) o una porción de verduras (que probablemente tengan las mismas calorías) ¿adivinen cuál va a elegir?
Por supuesto que el niño como cualquier persona si le dan a elegir va a escoger lo que más le gusta, entonces el niño ya aprendió que si no se come las verduras o la comida que no le gusta, posteriormente le van a dar algo que si le gusta, es como si llegáramos a un restaurante a la carta, vamos a elegir lo que más nos gusta del menú.
Mi niño enfermo no come
Es natural que cuando los niños están enfermos y sobre todo cursan con fiebre se les vaya el apetito, pero normalmente tendrían que aceptar adecuadamente los líquidos, por lo que hay insistir con su alimentación preparando los alimentos que más les gusten aunque no necesariamente sean los más nutritivos ya que esto será temporal, y ofrecer mayor cantidad de líquidos en su dieta.
Normalente pasados unos 3 días su apetito irá volviendo a la normalidad.
Veo a mi hijo muy flaquito a lado de otros niños
No es adecuado hacer comparación entre niños, frecuentemente las madres los comparan con los niños de su salón, o con el del vecino, “es que fíjese doctor que tiene unos compañeritos que están bien grandotes y yo veo muy flaquito a mi hijo a lado de ellos” o “es que tiene un primito que come muy bien, se acaba todo”.
Recordemos que actualmente México ocupa el primer lugar en obesidad infantil, si nuestro hijo tiene un peso y talla normal a lado de los niños con sobre-peso podrá lucir delgado, pero nuestro hijo está bien, los que están mal son los demás. La única comparación valida será la del pediatra para ver en que percentila está o para ver si está dentro de la curva normal de crecimiento, tamién se debe considerar la talla de los padres.
Mi hijo no quiere comer solo tomar leche
La leche también es un alimento
Cada que un niño entre 1 y 5 años que lo llevan al consultorio por que”no come nada” lo primero que trato de averiguar es que cantidad de leche esta tomando durante el día, esto muchas veces resuelve la incógnita del por qué dicen que el niño no come nada (aunque realmente si come y mucho)
Hay niños de 2,3 o 4 años de edad tomando cerca de 2 litros de leche al día, pero muchas veces los padres no consideran a esto alimento, por lo que para ellos el niño no come nada, obviamente si come, pero no los alimentos que debería estar comiendo.
Muchos niños prefieren la leche a otros alimentos, dado que les gusta más un vaso o biberón de leche que un plato de verduras o algún otro alimento, sin embargo a esta edad un niño no debería estar bebiendo tanta leche, 1 o 2 vasos de leche al día es más que suficiente para niños de esta edad.
La leche tiene muchas grasas y calorías, hay niños que después de los 2 o 3 años están bebiendo hasta 8 biberones de 8 onzas al día, eso es aproximadamente 1.8 litros de leche al día, usted como adulto intente tomar 1.8 litros de leche diarios por varios días y vea que tanto apetito tendrá para el resto de los alimentos
Si el niño está tomando pura leche y no come comida y la cantidad de leche que toma es mucho más que la que debería estar tomando para su edad, se tiene que reducir la cantidad de leche gradualmente para que vaya teniendo apetito para la comida, es posible que al principio sea difícil ya que el querrá su leche y no comida, pero al ver que no hay opción terminará consumiendo alimentos.
Los estimulantes del apetito para niños
Este tipo de medicamentos pocas veces tiene una indicación médica, estarían reservados para aquellos niños con pobre apetito pero que tienen un peso y talla baja, es decir un grado de desnutrición.
El tomar un estimulante del apetito no quiere decir que un niño con eso ya va a comer frutas, verduras y carnes.
La otra vez acudió a consulta una señora con su niño de 2 años que estaba sobrepasado unos 4 kilos de su peso, que su hijo no comía nada, pero se bebía casi 1.5 lts de leche al día, solicitaba un estimulante del apetito para que su hijo comiera, le explique que su hijo no necesitaba un estimulante del apetito, lo único que íbamos a lograr con el estimulante del apetito era que en lugar de beber 1.5 litros de leche al día iba a aumentar a 2 litros de leche al día y seguir acumulando kilos de sopbre-peso.
Puntos claves:
- Los niños deben comer para satisfacer su apetito y necesidades, no para satisfacer las expectativas de los padres.
- Ofrece a tu hijo alimentos saludables, limita su acceso a los no saludables.
- Vigila que la cantidad de leche que ingiere no sea demasiada para su edad.
- No sustituyas los alimentos por los que más le gustan, si no pronto su dieta constará de uno o pocos alimentos.
- Nunca lo obligues a comer. Puedes insistirle un poco pero nunca obligarlo.
- Haz de la hora de la comida un momento placentero para él y toda la familia.
- Tu hijo puede comer poco en un día, pero si con esa cantidad él corre, ríe, hace travesuras, etc., etc. no te preocupes, tu hijo está bien.
- Si además que no come tu hijo luce pálido, ha perdido peso, esta ojeroso, no juega, no corre, no ríe, cuidado tu hijo puede estar enfermo y debes acudir con tu pediatra.
- No hagas comparaciones entre el peso y talla de tu hijo con otros, acude con tu pediatra para su valoración.
- Acude regularmente con tu pediatra para ver que lleve una curva de crecimiento adecuada.
Si despues de darle lectura a este tema consideras que tu hijo no come nada acude con tu pediatra para una valoración
¿Tienes preguntas o comentarios? con gusto trataremos de responderlos