Los niños pequeños están aprendiendo a manejar sus emociones, estas son sensaciones poderosas que les impulsan a reaccionar intensamente ante las situaciones que se les presentan y los adultos en ocasiones necesitan una guía para enfrentar estas explosiones de emotividad. A continuación te presentamos información importante que puede ayudarte en el manejo de los berrinches en los niños.
Los berrinches y los niños
A medida que crecen los niños, comienzan a comprender lo que sucede a su alrededor y a conocerse a sí mismos. Van regulando poco a poco su control para el manejo de las emociones, lo cual va moldeando su comportamiento y personalidad.
Las emociones son propias de la naturaleza humana, nos acompañan toda la vida, por lo cual desde pequeños debemos aprender a regular nuestras reacciones.
En este aprendizaje continuo es muy importante la orientación de los padres ante las reacciones de los pequeños. Muchas veces ellos están tratando de canalizar el sentimiento que les embarga en el momento y en ocasiones no logran expresarlo de manera correcta. .
Entre toda la amplia gama de emociones que se pueden presentar, están las que se producen por situaciones que causan desagrado, enfado, miedo o ira. Estas sensaciones son válidas y se deben canalizar de la mejor manera.
¿Qué son los berrinches?
Los berrinches son una respuesta emocional a un estímulo del entorno que el niño todavía no sabe cómo manejar adecuadamente. Por lo tanto, aunque es normal, se trata de un comportamiento que debe ser corregido para evitar que se convierta en una reacción que se presente cada vez más frecuentemente. De no ser así, comienza a representar un problema difícil de manejar.
Usualmente, estos impetuosos arranques tienden a disminuir cuando el niño va adquiriendo mayor dominio del lenguaje y de sí mismo, aprendiendo a identificar y manejar sus emociones. Los niños van adquiriendo herramientas y habilidades sociales para identificar y expresar mejor lo que sienten, aquí juegan un papel importante los adultos.
¿Son normales los berrinches en los niños?
Los berrinches surgen ante una situación que produce molestia en el niño, es completamente normal que hasta cierto punto un niño pequeño se sienta frustrado cuando no puede obtener lo que quiere. El niño bebe conocerse a sí mismo y contar con la guía adecuada para lograr el control de los intensos impulsos que siente por hacer su voluntad.
Los berrinches debe ser corregido de la mejor manera posible. El niño debe entender que con gritos, insultos, pataletas o llantos sin control no es el medio obtener lo que quiere o para expresar lo que siente, se debe evitar reforzar este comportamiento negativo.
¿Por qué se presentan los berrinches en los niños?
Los berrinches son uno de los más grandes retos que se deben enfrentar durante el período de crianza. Los padres deben tener la habilidad y la paciencia suficiente para entender por qué se presenta un berrinche, cómo solucionarlo y a veces incluso prevenirlo.
Según el nivel de desarrollo del niño, irá adquiriendo aptitudes que ayudarán a manejar este tipo de emociones, evitando que se salgan de control.
Las posibles causas de los berrinches en niños se pueden resumir en lo siguiente:
- Falta de habilidades sociales. Significa que un niño debe integrar poco a poco en su aprendizaje la capacidad de afrontar y resolver problemas, al igual que comunicar sus deseos y necesidades. Si estas habilidades no se estimulan para ser desarrolladas, se producen irremediablemente los berrinches en situaciones que generen estados de ansiedad y frustración.
- Demanda de atención. Muchas veces, la gratificación tardía hacia el niño o la falta de atención por parte del adulto a cargo, es un detonante que puede generar berrinches.
- Cumplir normas. La causa más frecuente de los berrinches es tener que cumplir las normas y órdenes de los adultos. La obediencia a las normas es difícil de manejar por los niños, los cuales romperán en llanto si deben, por ejemplo, finalizar su videojuego o apagar la televisión para comenzar a hacer la tarea o arreglar su habitación.
¿Qué hacer ante los berrinches en los niños?
Desde el momento en que nace un niño, comienza su aprendizaje constante y empieza a desarrollar habilidades que pone en práctica a diario. Una de las cosas que debe comprender es que los berrinches no le proporcionarán lo que quiere obtener y que debe tratar de utilizar otros recursos para lograrlo, y también saber que a veces no es posible lograrlo.
No debes ignorar los berrinches que hace tu hijo, pues eso lo hará sentir peor.
A veces, cuando trata de conseguir algo y no logra hacerlo, se llena de emociones intensas que canaliza mediante el llanto y el berrinche. En estos momentos no debes ignorar lo que hace tu hijo, pues eso lo hará sentir peor. La mejor forma de solventar la situación es manejarla con respeto y disciplina y por supuesto con mucha paciencia.
A continuación verás algunos consejos a manera de guía, que te ayudarán en el manejo de los berrinches en los niños:
- Guarda la calma. El adulto debe permanecer en calma y tomar el control de la situación desde el inicio del berrinche, sin ignorar al niño. Hay que escucharlo para saber qué es lo que le molesta y cómo se puede solucionar la situación.
- Intenta hablarle y razonar con él. Ponte en sus zapatos y a su nivel, el grado de atención que le proporciones a tu hijo le hará mucho bien y disminuirá el nivel de ansiedad que le produce una situación determinada. Así sentirá que quieres entenderle y si te muestras con buena disposición, él también la tendrá.
- Sin regaños. Trata de calmar al pequeño con palabras cariñosas y un tono de voz agradable (sin gritar) para hacerle entender que debe calmarse. También procura que tus palabras sean simples y acordes para que el niño capte la idea de lo que quieres decir. Un buen abrazo siempre mejora la situación, ya que le aportará al pequeño seguridad y consuelo.
- Platicar de lo ocurrido. Una vez haya dejado de llorar y esté más calmado, trata de hablarle sobre lo ocurrido, sin regañarlo, pero haciéndole entender que es mejor cuando se comunica y logran comprenderse.
Berrinches y rabietas en niños de 1 a 2 años
A esta edad, los niños hacen berrinches debido a que se despierta su necesidad de autonomía y sienten el impulso de pasar los límites de la autoridad de los adultos, reafirmando con ellos su propia personalidad.
Entre los motivos que generan los berrinches a esta edad se encuentran los siguientes:
- Frustración. Cuando no son capaces de lograr algo, porque no pueden controlarlo todo o si algo es muy difícil de realizar para alguien de su edad.
- Para llamar la atención. Pues a esta edad les gusta ser el centro de las miradas y elogios por parte de los padres.
- Cuando las normas son poco claras o si los padres llegan a contradecirse.
Durante esta etapa el adulto debe mantenerse firme, repetir las reglas que se deben respetar y corregir el comportamiento con suavidad, pero sin dejar que el niño se salga con la suya.
Berrinches y rabietas en niños de 2 a 3 años
Por lo general, en esta etapa los berrinches comienzan cuando piden las cosas gritando, llorando y haciendo rabietas por situaciones simples que a su edad todavía no pueden controlar. Como cuando quieren subir a un columpio y está ocupado, porque su hermano agarró un juguete o si terminó su programa favorito.
A veces el llanto en esta etapa puede llegar a ser desesperante, por lo que es necesario corregir el comportamiento lo más rápido posible, manteniendo con firmeza las reglas y proporcionando al pequeño una justificación de la situación por la cual está llorando.
Lo más importante es no ceder ante la demanda, ya que si esto ocurre estarás reforzando un comportamiento negativo, que el pequeño realizará con más frecuencia cada vez.
Es importante observar y escuchar al pequeño, para determinar la causa de sus molestias y de esta forma lograr el manejo de los berrinches en los niños.
Berrinches y rabietas en niños de 3 a 4 años
Los niños de 3 a 4 años ya han adquirido cierta independencia y habilidades que refuerzan su personalidad. En estos casos, lo más frecuente es que el niño haga un berrinche porque:
- Quiere evitar las normas de la casa, por ejemplo, desea jugar con algo que puede ser peligroso para su bienestar.
- Se rehúsa a dejar una actividad divertida para realizar deberes o dejar el parque para volver a casa.
- Quiere llamar la atención.
- No quiere compartir.
La recomendación en estos casos es mantener la calma y tratar de entender la situación, para darle alternativas y hacer que se enfoque en otras cosas y no solo en el punto de atención que desencadena la rabieta.
Berrinches y rabietas en niños de 4 a 5 años
Si en las etapas anteriores los berrinches han sido manejados adecuadamente, lo más probable es que en esta edad se presenten con menor frecuencia. Aunque no se debe esperar a que desaparezcan del todo, pues forman parte del desarrollo normal de cada niño.
En esta etapa se recomienda ir afianzando los límites y establecer normas muy claras sobre lo que está permitido, así como hacerles saber que no se van a permitir conductas que incluyan rabietas, llantos, gritos y berrinches.
En conclusión
Es necesario que los padres observen muy bien la conducta del pequeño, para ayudar en caso de que los berrinches se presenten muy frecuentemente o se salgan de control. Los gritos, las agresiones o las reacciones muy exageradas para expresar este tipo de ira, no son maneras apropiadas para manifestar la frustración.
Existen muchos métodos que pueden ayudar a los padres a enfrentar y solucionar este tipo de situaciones, para que sean solo una molestia pasajera fácil de controlar. Hay herramientas que contribuyen a ayudar a los pequeños a entender que con este tipo de conducta no lograrán obtener todo lo que quieren en cuanto lo piden.
La información importante que has visto en este artículo sobre el manejo de los berrinches en los niños, es solo una muestra acerca de lo que deben hacer los padres, como guías de los hijos, para afrontar este tipo de situaciones.
Si deseas aprender sobre técnicas para controlar estas emociones y los métodos más adecuados para tratar las rabietas, encuentra aquí la guía para el Correcto Manejo de Berrinches en Niños de 1 a 5 años. No te pierdas esta gran oportunidad.