La primer consulta de revisión del bebé
. Y a veces la última
.
Ejemplificaré lo que sucede muchas veces en esta consulta.
Llegan papá, mamá, abuela y el hermanito mayor, todos felices y emocionados con recién nacido en brazos.
Toman asiento, durante el interrogatorio toda la familia presta más atención al bebé, que al pediatra mientras realiza las preguntas.
Llega el momento de la revisión y el bebé es acostado sobre la cama de exploración por alguno de los padres con toda delicadeza cual si fuera de porcelana. El pediatra empieza a quitar su cobija, desabrocha el mameluco y arroja el gorro por un lado para poderlo revisar.
Los padres parados a un lado, pendientes de cada movimiento del pediatra y del bebé, la abuela sentada pero sin despegarle la mirada, y el hermanito, ese si no se aguanta y se acerca a acariciarlo al mismo tiempo que le dice que no pasa nada mientras el pediatra lo revisa.
Después de la exploración los padres preguntan si todo está bien, mostrando cara de felicidad cuando el pediatra les dice “si todo está muy bien con su bebé”
Transcurre la consulta ya más relajados, el padre le dice a la mamá “pregúntale ahorita todo al pediatra, porque luego ya en la casa te salen las dudas”
El pediatra termina la consulta hablándoles del control del niño sano, de la importancia de las consultas de seguimiento para su revisión durante los siguientes meses.
“Nos vemos dentro de 1 mes” los despide el pediatra.
Por lo general ese bebé regresará varios meses después cuando empiece a enfermar, casi siempre después de los 7 a 8 meses de vida.
“Ya no lo habíamos traído por que no se había enfermado” es lo que la mayoría de las veces dirán cuando apenas van entrando al consultorio.
Afortunadamente la mayoría de los bebés crecerán y se desarrollarán adecuadamente, pero por desgracia un pequeño porcentaje no lo hará así, y cuando esto es detectado, en ocasiones ya es tarde, de ahí la importancia del Control del Niño Sano.
El Control del Niño Sano son consultas de seguimiento que se dan para vigilar que crecimiento y desarrollo sean adecuados en todos los aspectos, para identificar de manera temprana y oportuna las desviaciones en su estado de salud; antes de que éstas representen graves problemas y afecten la calidad de vida.
¿Cuándo deberían ser otorgadas las consultas de control niño sano?
La Academia Americana de Pediatría refiere lo siguiente:
• Primer consulta a los 7 días de vida
• Segunda consulta a los 28 días de vida o al cumplir 1 mes.
• Menor de 1 año: 1 consulta cada 2 meses hasta cumplir el año de edad (otras fuentes dicen 1 cada mes)
• De 1 a 2 años: 1 consulta cada 3 meses
• De los 2 a 3 años: 1 consulta cada 6 meses
• De los 4 a los 10 años: 1 consulta al año
• Entre los 11 y 14 años: 1 consulta
• Entre los 15 y 17 años: 1 consulta
No solo hay que llevar al niño al pediatra cuando está enfermo, ni hay que ocupar esa cita por enfermedad para considerarla como cita de control, debe hacerse el esfuerzo por llevar al niño a consulta cuando está sano para enfocarse en ello, el control del niño sano.
Así como son importantes las visitas de control Ginecólogo durante el embarazo para ver que todo vaya bien, así de importantes son las visitas de control al pediatra para lo mismo.
Debemos priorizar lo relacionado con la salud, médico, psicólogo, dentista, etc. lo cual cuando no hay enfermedad usualmente pasa a segundo término.
Hay padres que son muy puntuales con sus citas de control del niño sano, son pocos pero los hay, a ellos quiero felicitarlos.

Soy el Dr. Víctor Hugo Espinoza Román, infectólogo Pediatra, Egresado del Hospital Infantil de México “Federico Gómez” realizando en este Hospital las especialidades de Pediatría e Infectología Pediátrica, a 10 años de iniciados los blogs infectologiapediatrica.com y tu-pediatra.com donde trato de poner información confiable al alcance de médicos y padres de familia